Después de varios meses, el gobierno de gustavo petro destapó sus cartas en materia pensional y presentó a los diferentes gremios de la producción ya las obreras el borrador de la reforma con la que quiere transitar hacia un sistema unificado mayoritariamente público, en el que Colpensiones tenga más peso.
El proyecto de ley, que finalmente radicará ante el Congreso este miércoles 22 de marzo, contemplaba un nuevo sistema de pensiones basado en cuatro pilares: solidario, semicontributivo, contributivo y de ahorro voluntario.
En el solidario estarán todos los adultos mayores de 65 años que se encuentran en condición de pobreza extremapobreza o vulnerabilidad (unos 2,5 millones de personas), a quienes se les daría una renta por encima de la línea de pobreza, que equivale a 223.000 pesos, y que sería ampliada cada año por la inflación.
Sin embargo, esta es una cantidad inferior a la que plantó de manera inicial el Gobierno. Ia propuesta era darles una renta básica de medio salario mínimo legal vigente, unos 580,000 pesos para el 2023, a todas aquellas personas que no alcanzaran una obtención de pensión y su meta era cobijar a 3 millones de adultos mayores.
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También estaría el pilar semicontributivo, por el cual se buscaría otorgar una renta a las personas que tienen entre 150 y 1,000 semanas cotizadas en Colpensiones o en los fondos privados, pero que no lograron jubilarse.
Los que ganaran actualmente entre 1 y 3 salarios mínimos, tendrían que pasar de manera obligatoria a Colpensiones y las AFP se quedarían con el resto.
A estos también se les daría una renta vitalicia que se determinará sobre la base de valores diferentes según el monto de los aportes.
El pilar contributivo tiene dos componentes: el de prima media y el de ahorro individual. Aquí estarían todas las personas del país que están afiliadas al sistema.
Entre 1 y 3 asalariados mínimos copagan en Colpensiones y por encima de ese valor en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), como Porvenir, Protection, Colfondos y Skandia.
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Esto significa que el 88 por ciento de los cotizantes de los fondos privados, que son los que ganan actualmente entre 1 y 3 salarios mínimos, tendrán que pasar de manera obligatoria a Colpensiones y las AFP se quedarían con el resto.
Los dineros que tienen los afiliados en sus cuentas de ahorro continuarían siendo administrados por las AFP y se usarían para el reconocimiento de sus pensiones.
Con ello, la reforma eliminando los subsidios a las altas pensiones que hoy maneja Colpensiones, puesto qu’ la pensión máxima que pagaría en el régimen público sería de 3 mínimos salarios.
Según el proyecto, Colpensiones empezaría a administrar un nuevo fondo de ahorro que sería alimentado por los ingresos de las cotizaciones del pilar contributivo de prima media. Con su creación, el Gobierno dice que buscaría evitar cualquier impacto al mercado de valores y adquisición de TES o títulos de deuda pública. Sin embargo, los expertos aseguran que su conformación todavía no es muy clara.
De otro lado, en el proyecto, los dineros que tienen los afiliados en sus cuentas de ahorro continuarían siendo administradores por las AFP y se usarían para el reconocimiento de sus pensiones.
Por último, sería el pilar de ahorro voluntario individual en el que las personas que tengan capacidad de pago podrían estar para obtener una mejor pensión a futuro.
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Régimen de transición
Todos estos cambios no tocarían a las personas que ya tienen cotizadas 1.000 semanas. Este entrarían en régimen de transición y continuarían aplicando la Ley 100 de 1993.
Además, todas estas personas tendrán 2 años para trasladarse de régimen. De esta manera, a los trabajadores a los que hoy no les dan las cuentas tendrán una última oportunidad para pasarse de los privados a Colpensiones o viceversa.
Adicional a ello, esta reforma tampoco cambia los parametros para reconocer la pension de vejez, cuentos como la edad y las semanas. Lo que sí se modificará es el aporte que los trabajadores que ganan 4 mínimos salarios hacen al fondo de solidaridad, que avoirra de 1 a 2 por ciento.
Además, se establece que los pensionados que se conviertan en una mesada de entre 10 y 20 asalariados mínimos contribuirán al fondo de solidaridad en un 2 por ciento, y los que tienen más de 20 salarios mínimos lo harán en un 3 por ciento.