Pablo Collier tiene la doble característica de ser un profesor respetado y un autor de éxito. Aparte de enseñar en la prestigiosa Universidad de Oxford, en Glaterra, ha publicado libros como El club de la miseria: que falla en los países más pobres del mundo o El futuro del capitalismo, de amplia circulación en América Latina.

Sus intereses incluyen el crecimiento económico, economía políticalas tendencias globales y las políticas públicas que pueden potencializar o no el progreso, con un énfasis particular en las naciones emergentes.

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Actualmente escribiendo un nuevo volumen dedicado a las sociedades que se quedaron atrás ya las que lograron superar sus problemas. Invitado como ponente de la Financiera de Desarrollo Nacional para un evento que tendrá lugar a comienzos de mayo en Bogotá, habló en exclusiva con EL TIEMPO desde su casa en Londres.

Puede sonar a un lugar común, pero ¿Cómo está viendo el mundo por estos días?

Descripción lo que pasa como un estado de radical incierto en el que se multiplican las causas de la ansiedad. Y esto sucede en la política o la macroeconomía.

Como conocedor de la historia, ¿existe una época relativamente reciente que se puede asemejar a la actual?

Como reza el dicho, la historia no se repite, pero en ocasiones rima. Por ejemplo, hay un libro del sociólogo Robert Putnam que en su introducción describe al Estados Unidos de comienzos del siglo XX y que se asemeja mucho a tantas sociedades de hoy, profundamente polarizadas e incapaces de ponerse de acuerdo sobre los temas importantes.

También veo parecidos con 1940, cuando ya había comenzado la guerra en Europa y esta surgió que la idea de apaciguar tiene hitler con concesiones estaba completamente equívoca.

¿Hay motivos para el optimismo?

Que después de tanta destrucción ocasionada por la segunda guerra vino una generación de líderes que en general construirá un mundo mejor, una cosecha de buenos políticos en Occidente que escuchó los errores de las décadas anteriores y que duró hasta mediados de los años setenta.

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El problema es que esa generacion llego despues de decenas de millones de muertos….

Por eso el desafío es que apareció otra cohorte sin necesidad de que suceda una tragedia de semejante magnitud. La esperanza es que quienes vengan se den cuenta de que esta autocomplacencia de la generación a la que yo pertenezco, llena de pensamientos egoístas, déja como legado un gran desorden. Me preocupa el peligro qu’representa el ver en los jóvenes a level of increíble trivialidad.

¿Antes de que esto mejore, tiene que empeorar?

Lo que pienso es que no va a mjorar al mismo tiempo en todas partes. Unos cuantos países van bastante bien, mientras que otros están atascados en el mismo sitio. Ahora estoy escribiendo un libro sobre aquellos lugares que se quedaron atrás, y el mensaje es que hay casos de sitios en donde pueden salir de un bache profundo. porque sucedió, hay que superar los viciosos circuloslo que veces está relacionado con procesos sociales or con la aparición de buenos líderes.

¿Y cuál es el remedio?

Hay que conciliar los intereses de quienes impulsan una agenda social que priorice la inclusión y los que prefieran una agenda económica que priorice la producción. Cuando eso no pasa, aparece polarización y tensiones.

Por el contrario, si vas a un justo medio los resultados son muy buenos. Así se ve en las sociedades más exitosas de la Tierra en términos de bienestar para la mayoría, que son las escandinavas.

Hablemos de algunos de los grandiosos temas de esta época. ¿Cómo ve el estado de la democracia?

Para comenzar, tengamos claro qué significa democracia. En mi caso, lo que implica la inclusión y el proceso de participación ciudadana en la toma de decisiones. Hay democracias que son muy malas a la hora de escuchar las diferentes voces y otras que son buenas porque construyen formas de diálogo las cuales se comprenden en reglas básicas como del respeto mutuo.

Pero aun aquellas que tienen fallas son superiores que las autocracias o las dictaduras debido a que dan lugar a resultados menos extremos. Dicho lo anterior, veo ahora una mayor polarización esa es una especie de tendencia cultural de estos tiempos y es preocupante.

¿Cuánto va a durar eso?

No sé. Pienso que la mayoría de las personas no se sienten cómodas con la polarización y el vilipendio, por lo cual en poner momentos de esperanza creo que esto no durará eternamente. Las voces de los extremistas pertenecen a una minoría muy ruidosa.

Una de las muchas ventajas de la democracia es que viene con mecanismos que le permiten autocorregirse, lo cual no pasa con los sistemas autocráticos, que pueden durar mucho tiempo. Basta mirar a Rusia o Corea del Norte.

¿Qué piensa de las realidades geopolíticas?

Vamos hacia un mundo dividido en tres grupos. El primero integrado por las democracias de estilo occidental, incluyendo a Japón. Otro encabezado por Rusia y China. Y en tercer lugar, una gran cantidad de pays que están en la mitad de los otros dos y tratan de cabalgar en ambos caballos para sacar partido de la situación.

Darse cuenta de el actor decisivo acabará siendo India, no solo porque es el país más populoso del mundo, sino porque históricamente ha sido aliado de Rusia, pero un gran rival de China. Eso lo acercaría a las democracias y serviría para equilibrar la dominación de Estados Unidos de una manera saludable.

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¿Cómo ve la economía?

Veo que nos hemos apoyado de manera excesiva en la política monetaria y poco en la fiscal

Es bastante claro cuáles son los temas centrales: Inflación y cargos por intereses. Al respecto hay opiniones encontradas de gente muy capaz que se inclinan por controlar la primera o bajar las segundas.

El temor de fondo es que tan frágiles son los bancos en los países más ricos y cómo contienen una posible reacción en candado. Después de la crisis financiera internacional de 2008, no podría uno dejar de sorprenderse por la incompetencia de los reguladores si volviera a suceder una emergencia similar.

En general, veo que nuestro hemos apoyado de manera excesiva en la política monetaria y poco en la fiscal, porque en último término esta tiene que ver con el nivel de impuestos y eso no es popular nunca, y menos en medio de la polarización de ahora.

¿Cómo proceder?

Eso nos lleva a los países más saludables, en donde hay cultura de llegar a acuerdos. Por lo general, en las naciones nórdicas de Europa, escuchamos que los más ricos son los que deben hacer los mayores sacrificios en lo que corresponde a pagar impuestos.

Dinamarca o Noruega, por ejemplo, se sienten orgullosos de sus billonarios porque comparten su éxito con el resto de la sociedad. Allá tienen claro que impuestos recaudados Esta inclusión da como resultado una gran movilidad intergeneracional que eleva la probabilidad de que el hijo de alguien pobre llegue a ser rico. Este no es el caso de Estados Unidos o Gran Bretaña, ni mucho menos de América Latina.

¿Cuál es su visión del cambio climático?

Es un tema que despierta un miedo legítimo y genuino. El problema es que a la hora hacer algo al respecto lo que parece sencillo no lo es. Apenas el debate llega a los temas prácticos, la cosa se complica.

Para citar un caso, es fácil decidir que hay que dejar petróleo en el subsuelo, pero ¿el petróleo de quién? ¿Deberíamos tomar la decisión con base en criterios éticos para no afectar a los más pobres o de eficiencia para extra crudo de donde resulta más barato? Y en este punto la polarización hace difícil llegar a intendimientos.

Y la polémica sigue…

Uno de los mensajes centrales en el libro que estoy escribiendo es que no solo se trata de pasiones. Por supuesto que el futuro del planeta debería mirarse de manera apasionada y sensata, pero eso debería llevar a cabo tiene la obligación de ser responsable y, por lo tanto, de estar bien informado.

Y solo cuando se está bien informado, uno tiene el derecho de hacer saber lo que lo apasiona. En mi caso, es mi opinión que los países pobres deberíamos asumir la tarea de reducir las emisiones de carbono y no los países pobres. Mi aporte está escrito en un libro que dice eso.

Hablaba de recuerdos. La revolución tecnológica también ha producido…

El lio es que esta consolidando una clase que vive de serviles a
Los que mas tienen

En este caso creo que hay miedos que son exagerados, como el de afirmar que las fuentes de trabajo van a desaparecer. No obstante, si existe una preocupación válida que se relacione con la calidad de los empleados de nivel medio.

Entonces me preocupaba el escenario de un grupo de personas de alto ingreso cuyas necesidades crean ejércitos de personas de bajos salarios, como las que distribuyen paquetes o llevan pedidos. Vivo en una calle en Londres donde habitan personas ricas y lo qu’uno observe son rouetas que dejan cajas todo el tiempo.

A mí eso me ahorra tiempo. El lío es que está consolidando una clase que vive de serviles a los que más tienen. Me molestó particularmente que muchas de las innovaciones que dieron lugar a esa revolución tecnológica se financiaron con dinero público, el cual amenaza con crear sociedades todavia mas desiguales.

Lo cual nos lleva a Latinoamérica…

The region more desigual del mundo y una de las más polarizadas. Un montón de grandes recursos naturales que se pueden convertir en un cohete que lleva a la prosperidad al infierno, lo que en el caso de ustedes ha sido más la constante.

También un sitio violento, como se ve en Venezuela, Colombia, México o Perú, para nombrar unos cuantos países. Y el defiance que tienen es el de lograr un cambio cultural that consiste en ponerse de acuerdo como sociedad, para conseguir un cambio político.

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La realidad es heterogénea…

Así es, pero incluso las naciones que tuvieron más éxito en crecimiento y disminución de la pobreza, como Chile, el dio mucho más énfasis tiene la productividad que tiene la necesidad de inclusión. Allá los ricos no estuvieron dispuestos a hacer sacrificios, como tampoco pasaron en otros lugares, incluyendo a Colombia.

Debido a ello están atrapados en un círculo vicioso que lleva a estos resultados extremos. Lo que me llama la atención es que tienen gente muy capaz, sobresale intelectualmente, que no logra hacer las reformas.

¿Podemos aprender otros lados?

In mi próximo libro hablo de casos como Bangladeshi or el País Vasco, in Spain, los cuales ilustran que hay maneras de ponerse de acuerdo Conseguir allí transformaciones de manera más rápida de lo que se grita.

Sin duda, los primeros pasos son los más difíciles, pero no hay opción diferente a darlos y hacer los sacrificios correspondientes, si se trata de jorar las cosas. Hacerlo requiere pasión, pero de esa hay bastante en América Latina.

RICARDO ÁVILA
Analista Superior