La procuradora general de Israel ha emitido una fuerte crítica hacia el gobierno liderado por el primer ministro Benjamin Netanyahu, acusándolo de aprovechar la situación en la Franja de Gaza como un desvío para impulsar leyes que, en su opinión, ponen en riesgo la democracia del país, particularmente la autonomía del sistema judicial.
En su discurso en el encuentro anual del Colegio de Abogados de Israel, la fiscal general manifestó su inquietud por el deterioro de las instituciones democráticas y alertó sobre el perjuicio continuo al sistema de justicia. Indicó que estas acciones podrían transformar la percepción del país como una democracia con un poder judicial independiente, señalando que no es una advertencia para el futuro, sino una representación de la situación actual.
El líder del máximo órgano judicial participó en la ceremonia, señalando que la estructura democrática de la nación es «vulnerable y tenue». Subrayó que el Gobierno carece de mecanismos para nivelar los poderes del ejecutivo y afirmó que los esfuerzos por debilitar la independencia de los tribunales no prosperarán, reafirmando que el sistema judicial se mantendrá resistente frente a los intentos de restar poder.
En respuesta a estas críticas, el titular de Justicia de Israel justificó las medidas del ejecutivo, sosteniendo que lo que se encuentra bajo ataque es la soberanía popular. Esta afirmación evidencia la profunda fractura dentro de la sociedad israelí concerniente a las reformas judiciales sugeridas y el rumbo político de la nación.
Estas tensiones se producen en un entorno donde el primer ministro Netanyahu se enfrenta a numerosos retos legales y políticos. Ha sido imputado por soborno, fraude y abuso de confianza en diferentes casos de corrupción, y su juicio ha sido un tema central en la política de Israel. Además, la Corte Penal Internacional dictó órdenes de arresto contra Netanyahu y su exministro de Defensa por presuntos delitos de guerra y crímenes contra la humanidad en Gaza desde octubre de 2023.
La comunidad global ha mostrado su inquietud acerca de la situación en Israel, particularmente en lo que respecta a las reformas judiciales y las actividades en Gaza. Entidades defensoras de derechos humanos junto con la ONU han señalado el carácter ilegal y violento de ciertas políticas, mientras que ciertos integrantes de la comunidad internacional están evaluando sus vínculos con Israel.