En menos de dos meses dos aerolíneas quebraron en el país, declarando la suspensión de sus operaciones. El primer caso fue el de Viva Air, que dejó de volar inmediatamente; el segundo segmento de Ultra Air, que dio un repaso acerca de la operaría sólo tiene la media noche de ese mismo 30 de marzo.

Desde entonces miles de pasajeros reclaman la devolución del dinero que pagaron por tiquetes para este 2023 e incluso 2024. Sin embargo, aún no hay luz verde.

El ex vicepresidente de Colombia, Germán Vargas Lleras, dedicado a columna de domingo en EL TIEMPO a este tema y dijo que la crisis es más visible en esta Semana Santa, pues confluyen varios elementos:

«Además de la quiebra de las aerolíneas Viva y Ultra, la falta de infraestructura aeroportuaria, l’urgency de avanzar en una regulación más moderna y competitiva y una política de cielos abiertos, libertades y plena liberalización del transporte aéreo».

(Siga leyendo: Ultra Air y Viva Air: Fiscalía evalúa los casos y anunciaría primeras decisiones).

Según explicó, la opción viable «no es crear que la crisis va a solucionar un punto de plano presidencial y declaraciones populistas»sino otorgar el derecho de que una aerolínea extranjera pueda embarcar pasajeros en rutas nacionales, proyecto que presentó en tres oportunidades al Congreso, “con ella se reduce el papel del Estado, depositando en las empresas privadas la definición de las rutas, la frecuencia de estas , las sillas ofrecidas, las tarifas, las condiciones y también las promociones”.

El turismo vive la crisis de pares de la última década. Pero el Gobierno no ha hecho más que equivocarse

«Que haya mayor cantidad de operadores y mayor cantidad de rutas sin restricciones conduce, naturalmente, a una mayor oferta, tanto nacional como internacional, y por este camino a una reducción significativa de las tarifas».

Vargas Lleras calificó a la situación actual del turismo como la peor de la década se procede a enumerar una lista de equívocos que, según él, ha hecho el Gobierno: «Comenzando con el aumento del IVA a los tiquetes aéreos del 5 al 19 %, ya los servicios turísticos y hoteleros del 0 al 19 %. Nada ha hecho en cuanto a planes para mitigar los efectos de la inflación, devaluando y aumentando el precio de los combustibles, lo que representa para la industria costos adicionales del 101%”.

(Lea también: El ‘error’ que halló la Procuraduría en integración entre Avianca y Viva Air).

Asegura como ha habito una ausencia total de la Aeronáutica Civil, la SIC y el Supertransporte en cualquier supervisión financiera, comercial, logística, operativa y administrativa.Lea tiene la columna completa.

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