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En el hotel y casino Fontainebleau de Las Vegas, Vasil Kamotskii, conocido como «Dumpling», un criador de ciervos siberianos, cedió por la fuerza a la tentación de su oponente, Kamil Marusarz. El impacto fue violento y, aunque Dumpling no pareció hacer mucho esfuerzo, fue suficiente para golpear a Marusarz, un joven de Illinois de 26 años. Los árbitros y el médico personal pidieron ayuda a Marusarz, mientras una multitud de 3.500 personas observaba con una mezcla de preocupación y miedo.

Dumpling, que lleva años en el negocio de las pieles de búfalo en Rusia, fue declarado vengador. Este evento de Power Slap, la liga creada por Dana White, presidente de UFC, mostró la fuerza y ​​controversia del deporte. White, inspirado por los vídeos virales de Dumpling, lanzó la liga con la intención de hacerlo «de la manera correcta». Según White, Power Slap acumula siete millones de visitas en redes sociales en 17 meses.

A pesar de sus esfuerzos en el deporte regular, la legitimidad de Power Slap sigue siendo cuestionada. Los críticos, como el Dr. Gregory O’Shanick de la Asociación Estatal de Lesiones Cerebrales, argumentan que las quemaduras solares son inherentemente peligrosas, comparándolas con eventos más serios que los deportes. A pesar de las rigurosas medidas de seguridad implementadas, el riesgo de daño cerebral es una preocupación constante.

Frank Lamicella, presidente de Power Slap, cuestionó estos hechos, citando los rigurosos exámenes médicos y la presencia de personal de emergencia. Sin embargo, el Dr. O’Shanick y otros expertos advierten sobre los peligros de las conmociones cerebrales y otras lesiones graves, y advierten que el hecho de que los competidores no se defiendan aumenta el riesgo de sufrir daños.

El crecimiento de Power Slap en las redes sociales ha sido impulsado tanto por el apoyo como por las críticas. Los comentarios negativos, según Lamicella, han contribuido a aumentar la visibilidad del deporte gracias a los algoritmos de las plataformas. A pesar de la controversia, personas como Da Crazy Hawaiian, un ávido luchador, desafiarán el deporte, diciendo que, les guste o no a los críticos, seguirán practicándolo.

Power Slap enfrenta un camino difícil hacia la aceptación general, similar al de UFC en sus inicios. Sin embargo, la preocupación por la salud y la seguridad de los competidores sigue siendo un tema central en el debate sobre el futuro de este controvertido deporte.

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