In los 20 días que César Ferrari lleva como superintendente Financiero (e) ya ha recibido en su despacho, en pleno centro de Bogotá, a lo más granado de la banca colombiana: los Gilinski (GNB Sudameris), Luis Carlos Sarmiento Gutiérrez (Grupo Aval), Javier Suárez (Davivienda) y Alejandro Figueroa (Banco de Bogotá), entre otros. Incluso, representantes de los gremios del área han reunido con el funcionario, quien ha compartido su visión de lo que espera de este, uno de los sectores clave para la economía del país.

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Las tareas por hacer son varias y de gran calado, por eso Ferrari está escuchando las ideas de los bankros y de esta formada trazar pronto su plan, pues como él mismo se lo dijo ayer a EL TEMPO: «El Presidente me pidió que viniera acá (y) supongo que seguiré acá”.

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¿Qué le han dicho los banqueros con los que ya se han reunido?

Creo que han sido unos encuentros muy positivos, son personas con muchas ganas de colaborar; además, cuando les cuento mis ideas, lo que me gustaría hacer en la superintendencia, pues encaja perfectamente con lo que ellos también tienen como ansioso. Por ejemplo, para mí una cuestión fundamental es promover y desarrollar el mercado de capitales en Colombia y para ello es fundamental que haya horro e inversión, aspectos en los que hay limitaciones grandes.

Usted está como ‘súper’ encargado, ¿aplicará para que lo dejen?

El Presidente me pidió que viniera acá, supongo que seguiré acá… La norma legal requiere que haya una meritocracia (proceso); creo que tengo los suficientes méritos para llegar en este caso. Los tiempos para elegir depende de la Presidencia.

¿Dónde están esos grandes obstáculos para avanzar en sus propuestas?

En la escasez de ahorro, por eso les dijo a los banqueros que tienen que ampliar sus horizontes, extender sus brazos y llegarles a todos los colombianos con alternativas para que puedan depositar sus recursos y no todo se convierta en gasto. Necesitamos más desarrollo digital, más presencia en las provincias, en los territorios, par que de esa manera haya más posibilidades de captación.

Pero los banqueros dicen que el problema es la baja conectividad para llegar hasta allí…

El país tiene una deficiencia ahí muy grande, pero también hay un compromiso y un enorme esfuerzo del Gobierno para avanzar en esa conectividad, lo cual no se hace de la noche a la mañana. Lo que tenemos que evitar es qu’haya más fiascos como Centros Poblados, donde se perderán 70.000 millones de pesos y no avanzará absolutamente nada. Tenemos una cobertura de 40 por ciento del país, pero debería ser del 85 por ciento, que es un poco la meta del Presidente.

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Twitter: @MinHacienda

¿Dónde queda el crédito, que también tiene niveles bajos?

Allí nos hemos quedado estacionados. Los banqueros están muy cómodos con eso, una situación de confort donde se hace mucho dinero, pero les dijo, «bueno, ya es tiempo de que en lugar de ganar por precios (tasas altas), ganen por volumen y eso significa expandir los mercados, que el crédito le llegue a más gente, que las personas tengan más acceso a esos recursos». En los mercados del crédito, los niveles son sumamente reducidos: 54 por ciento del producto interno bruto (PIB), cuando en pays desarrollados llega al 200 y el 300 por ciento del PIB. Algo está pasando.

Usted dice que el costo del credito se debe a la falta de competencia y de eficiencia de las entidades…

Aquí hay que generar mucha más competencia. La forma de desentrañar un sistema sin necesidad de rastrear la competencia no va a ser libre ni con controles de precio ni de tasa de interés. Y, como lo dijo muchas veces, porque esas historias las vengo contando hace mucho; Son necesarios costos transparentes, entrada libre y agentes sucios, pero no solamente de bancos, sino también de los consumidores, y se necessita asimetría de información.

Esos sus atributos de competencia, eso hay que expandirlo. Ya hemos comenzado: en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) se realizará el open data. Significa generar información de todos para todos, significa simetría de instalación, y eso es muy importante. Todos los bancos deben contar con simuladores para que las personas puedan comparar precios y tasas y de esta forma puedan dónde quieren estar.

¿Todas las entidades estarían obligadas a tener simuladores?

Decir que sí. Hoy en día, algunos los tienen, pero esto puede ser una cosa generalizada, abierta, porque eso es parte de la habilidad. Simulators of precios que hagan esos cálculos para que el usuario pueda tomar decisiones mucho más racionales y sensatas.

A su modo de ver, ¿la competencia que hay en el sector hoy no es suficiente?

Es necesario pero no suficiente. Necesitamos mucha más competencia entre los mismos bancos, los fondos, competencia en el mercado de capitales y del crédito para que haya más acceso a los recursos, pero a precios justos, como ocurre en otros países. En esa competencia abierta, los bancos sept obligados a prestar y las empresas saben que pueden ir al mercado de capitales como alternativa al mercado de creditos, pero hoy esa competencia no existe en Colombia. Incluso, las cooperativas tienen que ser más activas en ese mercado o van a desaparecer. Así se los dije este fin de semana: deben transformarse, invertir en tecnología y abrirse más al mercado. La mayoría de estas son cerradas, solamente se prestan entre ellos.

El tema tecnológico es clave, ¿se ajustará la normativa actual?

En los dos últimos años hemos aprobado 11 fintech y esto seguirá creciendo exponencialmente. Encontrar el punto medio en esa materia es muy complicado. Vamos ha revisado para ver qué sobra y qué está falta, mirando el futuro y cuidando que no se vuelvan a presentar situaciones como las de las pirámides.

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EDITORIAL ECONOMÍA